Cerro Azul, ubicado en San José del Guaviare, es un tesoro de la Amazonia colombiana, donde la historia y la naturaleza se encuentran en perfecta armonía. En medio de la Serranía de la Lindosa, sobre las antiguas formaciones rocosas del escudo guayanés, se preservan valiosas pinturas rupestres de más de 8,000 años de antigüedad. Este patrimonio cultural, custodiado por comunidades campesinas, es un reflejo de la vida y creencias de los pueblos ancestrales que habitaron la región.
Conocido como la "Puerta de Chiribiquete" por su afinidad geológica y cultural con el Parque Nacional Natural Serranía de Chiribiquete, Cerro Azul es una ventana abierta al pasado. A lo largo de sus 1,200 metros cuadrados de arte rupestre, sus pictogramas cuentan historias de la vida, la naturaleza y la espiritualidad de las antiguas civilizaciones amazónicas. Este legado arqueológico fue reconocido oficialmente en 2018 como patrimonio por el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH), y es un sitio único para quienes desean profundizar en la historia precolombina de Colombia.
Cerro Azul, situada a 46 km de San José del Guaviare, se encuentra aproximadamente a una hora y media en carretera, en un trayecto de 16 km de vía pavimentada. Al llegar, guías locales —campesinos e indígenas— te acompañan en el recorrido, compartiendo su conocimiento y sus historias sobre el territorio. Estos guías han sido actores clave en la transformación de la zona, que antes era difícil de visitar debido al conflicto armado y a la economía de cultivos ilícitos. Hoy, apostando por el ecoturismo comunitario, la Asociación Comunitaria Fantasías de Cerro Azul Puerta de Chiribiquete lidera la preservación de este ecosistema, en alianza con instituciones como ICANH, CDA y Parques Nacionales.
Cerro Azul no solo es importante por su arte rupestre. La Serranía de la Lindosa, ubicada en la intersección de cuatro áreas biogeográficas de Sudamérica, presenta una biodiversidad única. En este entorno conviven especies de fauna y flora que usualmente no comparten hábitats, lo que convierte a Cerro Azul en un destino privilegiado para el ecoturismo y la conservación. Aquí, además de su valor cultural, la biodiversidad se erige como un testimonio vivo de la rica historia natural de la región.
Llegar a Cerro Azul es una aventura en sí misma. Desde San José del Guaviare, el trayecto toma aproximadamente 1 hora y 30 minutos. La ruta inicia con un camino de 16 kilómetros pavimentados y luego, a partir del Puente Nowen, continúa por una vía destapada de unos 30 kilómetros. Te recomendamos hacer el recorrido en un vehículo 4x4 para mayor comodidad y seguridad en el camino.
Para disfrutar al máximo de esta experiencia, te invitamos a confiar en Tukan. Con nosotros, tendrás un recorrido completo y seguro hacia Cerro Azul, donde podrás explorar las pinturas rupestres, repartidos en tres impresionantes paneles, un mirador con vistas mágicas y una caverna de 210 metros de longitud. ¡Déjate sorprender por la historia y la belleza de este lugar con Tukan a tu lado!
Cerro Azul es un portal a miles de años de historia y cultura amazónica. Este sitio único ofrece una experiencia inolvidable, donde la majestuosidad de sus pinturas rupestres, su biodiversidad y los relatos de la comunidad local crean una conexión profunda con nuestras raíces. Si deseas descubrir el corazón de la Amazonia y explorar un rincón de Colombia lleno de magia e historia, Cerro Azul te espera para sorprenderte.
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